Desde 1864, y hasta bien entrado en siglo XX, las explotaciones mineras en los montes de Triano y de Galdames atrajeron a miles de peones braceros de muy diversa procedencia. Gentes que buscaban mejorar su vida alejándose de la pobreza. Su memoria está aún presente y forma parte de esa diversidad cultural que debemos proteger y potenciar.
Recorreremos los restos de los poblados mineros en los montes altos de Galdames, hoy abandonados, ruinosos y casi desaparecidos, que suscitan la pregunta ¿Cómo pudieron vivir allí cientos de personas?
Se entregará un folleto con la historia de los montes altos de Galdames.