Las nobles casas del barrio Bengoetxea se dispusieron alineadas al camino, para conseguir beneficios de los transeúntes y para dar presencia y prestigio a sus moradores. Frente a una de ellas observamos una enigmática cruz de hierro que nos servirá para desentrañar el asesinato del propietario de la vivienda, una truculenta historia en la que se entremezclan ambiciones familiares, nocturnas armas blancas y las pugnas entre parroquias para hacerse con el codiciado cadáver. Casualmente sucedió todo un 26 de octubre… pero 283 años atrás. Nos lo contará Félix Muguruza.